Además, esta situación se produce con el agravante, según el dirigente socialista, de una situación económica relativamente buena. "Todo lo que depende del Gobierno ha sido un desgobierno", sentenció.

Caldera resaltó como ejemplos de esta mala gestión la crisis de las vacas locas, el Tireless, la legionella o l actitud de Piqué con el presidente norteamericano, George Bush. "La cabeza se usa para pensar, no para dar cabezazos ni cabezadas", aseguró esta mañana.

Según los socialistas, han quedado pendiente para septiembre, asuntos tan importantes como el funcionamiento del servicio público del transporte, el aumento de la desigualdad, el descontrol de la inflación, la pesca o los apagones.

Para finalizar, afirmó que este es un Gobierno "sin fuelle" ni posibilidades, que tiene que enfrentarse a un Partio Socialista que está haciendo una oposición útil y está demostrando que "es necesaria una alternativa que potencie la cultura, la tecnología, la familia o la reforma fiscal".