La diputada del PP María Salom le acusó, durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, de ir "por libre" en la política de inmigración y pedir un pacto cuando el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha encontrado "asustado, con el agua al cuello".

"Cuando llegaron al Gobierno ya había un acuerdo, que con la regularización masiva se rompió", agregó, y sólo ha pedido el apoyo al resto de los grupos ante el "fracaso" de este proceso de regularización, con la que "lo que debería ser una esperanza para muchísimas personas se ha convertido en pesadilla".

Denunció que el Ejecutivo socialista ha pasado dos años y medio "tan seguro del éxito que no quiso compartir la medalla con nadie, y ahora quiere colgarnos una mordaza para que no hablemos", agregó Salom, quien emplazó al Gobierno a que reconzca los errores y "rectifique".

En lugar de "ganar tiempo" con la creación de una subcomisión, dijo a Caldera, "pónganse las pilas". Usted, espetó, "es la máxima expresión de la ceguera política del Gobierno. El político que no ve los problemas nunca será capaz de solucionarlos, ni siquiera con un pacto".

Caldera le respondió que el Gobierno practica una "política sensata, no la demagogia ni la hipocresía", y busca el consenso no sólo con las fuerzas políticas, sino con las organizaciones no gubernamentales y los agentes sociales.

Recordó al PP que, "cuando ustedes gobernaban entró más gente ilegalmente que nunca", y le advirtió de que se van a quedar "solos en una estrategia radical que sólo pretende generar daños en la convivencia".

"NO HE VISTO SU CESE EN EL BOE"

La secretaria de Política Social y Bienestar del PP, Ana Pastor, le preguntó si aún sigue siendo el ministro responsable de la Inmigración. "No he visto su cese en el BOE", ironizó Pastor. "¿Dónde estaba el miércoles, cuando la vicepresidenta le desautorizaba al reunirse con los portavoces de los grupos parlamentarios en el Congreso?".

"Todos sabemos que no le gusta hablar de la inmigración, ni tampoco actuar", prosiguió. "Siempre llega tarde, llega mal y llega a rastras. Deja pasar el tiempo hasta que los problemas crecen".

Sentenció que "el balance es tan malo porque usted no se entera, o sí se entera y pretende que otro le resuelva la política de inmigración. Sigue sin admitir que tiene una crisis personal e institucional".

EL PP, "GRAN REGULARIZADOR"

Caldera replicó que "lo que jamás hará el Gobierno son regularizaciones masivas como las que hicieron Rajoy y usted siendo su subsecretaria: sin contrato y con una gestión desastrosa".

"Nunca he visto una hipocresía y un cinismo moral tan grande, admito que puedan criticar en cualquier esfera, pero que jueguen con aspectos tan serios como la convivencia, no lo entiendo", agregó el ministro.

Aseguró que los gobiernos populares fueron los "grandes regularizadores, hicieron cinco regularizaciones sin contrato de trabajo", y ahora "se atreven a criticar, no es aceptable", y el único objetivo es "buscar enfrentamientos, pero ni el Gobierno ni los españoles se lo van a permitir".