Según explicó en rueda de prensa el presidente de IMCA y director general adjunto de la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA), José Antonio Olavarrieta, se busca además "aumentar el número de clientes de las cajas y su gama de productos y servicios".

Olavarrieta explicó que la red se ha creado sobre la base de un acuerdo marco, sin ningún coste de adhesión para las entidades, y que se desarrolla después a través de negociaciones bilaterales.

El presidente del IMCA señaló que la red se caracteriza por la "transparencia", unas comisiones "competitivas", control sobre los diferenciales de cambio y la aplicación de los tipos de cambio oficiales de los bancos centrales de los distintos países.

Además, con este sistema se garantiza que la remesa será entregada el mismo día o al día siguiente.

Así, la red del IMCA se basa en la plataforma de remesas española "Bravo", integrada por 31 entidades y coordinada por la CECA. Fue el propio Olavarrieta quien presentó la idea de red mundial en febrero de 2007 a Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial y la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Con esta red se quiere aprovechar la capacidad de las 2.034 entidades, representadas por 109 instituciones, que están dentro del Instituto, con sus 192.000 oficinas repartidas en más de 90 países.

Olavarrieta aseguró que el potencial de esta red "es importantísimo", ya que en España, por ejemplo, las cajas gestionan el 20% de las remesas que se envían.

Entre el 65% y el 70% de las cantidades que los inmigrantes envían a sus países de origen, se hace al margen las entidades financieras sujetos a la "disciplina" del Banco de España, indicó el directivo de la CECA.

En este sentido, Olavarrieta comentó que la razón de que los inmigrantes prefieran canales alternativos a los bancos y las cajas, más allá de su estado legal, es la "falta de cultura financiera" y que para muchos de ellos "entre sus prioridades no está el acercarse a una entidad financiera".

Sobre cómo puede afectar al desarrollo de esta red la desaceleración de la economía mundial, el presidente del IMCA apuntó que ésta se presenta como una "oportunidad", porque se van a "exacerbar mucho más los flujos migratorios y necesitarán de una cobertura financiera".