La caja señaló que durante el 2002 realizó dotaciones adicionales por 41 millones de euros, con el objetivo de "incrementar la fortaeza patrimonial del grupo", ya que las incertidumbres del entorno económico y geopolítico para el próximo ejercicio "han hecho aconsejable, como medida de prudencia, tomar la decisión de realizar estas dotaciones cautelares".

Sin embargo, la dotación por insolvencias ascendió a un total de 205,6 millones de euros, cifra que supone un crecimiento del 4,1% a la registrada en el 2001.

El volumen de negocio creció un 7,3%, hasta alcanzar los 112.841,3 millones de euros, mientras que los recursos de cientes aumentaron un 6,7%, hasta los 69.132,8 millones de euros.

Además, el avance de la inversión crediticia, que aumentó un 8,3% hasta los 43.132,8 millones de euros, se basó en el crecimiento de la financiación de vivienda, capítulo que aumentó un 24,9% y alcanzó al cierre del ejercicio un total de 20.354,5 millones de euros.

Así, la buena marcha de la financiación de vivienda y de la captación de ahorro, hizo que el margen financiero alcanzara los 1.580,1 millones de euros, lo que supone un icremento del 8,7% respecto al 2001.

Las comisiones por servicios bancarios crecieron un 11,2%, entre las que destaca el crecimiento del 15,3% en las correspondientes a medios de pago.

De esta forma, el márgen básico creció 146,4 millones de euros, un 7,7% más respecto al ejercicio anterior, hasta alcanzar lo 2.046,8 millones de euros.

El margen de explotación alcanzó al cierre del cuarto trimestre un total de 923,1 millones de euros, lo que supone un aumento del 0,2% respecto al registrado e diciembre del año anterior.

El ratio de morosidad de Caja Madrid se situó en el 0,79% y la tasa de cobertura de morosidad alcanzó el 220%.