Según informó hoy la entidad bancaria, este comportamiento se debió a la mejora del negocio tradicional, sin recurrir a resultados extraordinarios.

El volumen de negocio gestionado por la caja y su grupo consolidado también creció en este periodo en 3.672 millones. Con este crecimiento del 12,5%, la cifra total de negocio alcanzó los 33.030 millones de euros.

Las inversiones crediticias se situaron en este periodo en 13.326 millones, con un aumento del 6,7% sobre el mismo periodo del año anterior.

El total de recursos de clientes administrados cerró en una cifra de 18.661 millones, con una variación interanual por importe de 2.959 millones, lo que representa un crecimiento del 18,8%.

En la cuenta de resultados, el margen de intermediación se incrementó en un 6,5%, apoyado fundamentalmente en el aumento de negocio gestionado y en la contribución de las sucesivas subidas de tipos de interés. El margen ordinario aumentó un 1,9%.