Los siete episodios de ‘El Prado en femenino’ está dedicado a importantes promotoras artísticas europeas, como Cristina de Suecia, Isabel de Borbón, Mariana de Austria, Mariana de Neoburgo o Isabel Clara Eugenia, y en su elaboración han intervenido conservadores del ámbito académico nacional e internacional, según informó la Fundación “la Caixa”.

Los capítulos de ‘El Prado en femenino’ que estarán disponibles desde hoy en el canal temático dedicado al Museo Nacional del Prado en CaixaForum+ son los siguientes: ‘Promotoras artísticas de las colecciones’, que mostrará los retratos de las reinas, regentes y gobernadoras expuestos en la colección permanente de la pinacoteca para explicar su contribución en la conformación de la misma; y ‘María de Hungría’, considerada la “figura más sagaz” de la casa Austria en su relación con las artes, tanto en lo concerniente en “la construcción de la imagen imperial del emperador Carlos V”, su hermano, como en “la instrumentalización del arte al servicio de los intereses políticos de su dinastía”.

Otros episodios son ‘Isabel Clara Eugenia’, cuyos retratos elaborados por Sánchez Coello, Pantoja de la Cruz o Rubens adornan las paredes del Prado junto con obras patrocinadas por ella misma; ‘Isabel de Borbón’, que se centrará en uno de los encargos artísticos más destacados de cuantos realizó como reina consorte: las 26 piezas destinadas a decorar sus estancias privadas de la Torre de la Reina en el Alcázar de Madrid; y ‘Cristina de Suecia’, una “mujer extraordinaria, con una formación exquisita, que ha pasado a la historia como una de las principales coleccionistas de la Edad Moderna”.

También ‘Mariana de Austria’, que acerca “las estrategias iconográficas” que utilizó para “construir su imagen regia, legitimar y fortalecer su posición política y difundir su poder entre las cortes europeas del Barroco”; y ‘Mariana de Neoburgo’, “una de las grandes promotoras artísticas del siglo XVII” a pesar de “una vida itinerante, de sus serios problemas de salud -provocado en gran medida por la ansiada búsqueda de un heredero- e incluso de los problemas económicos que padeció tras la muerte de su marido, Carlos II”.