El máximo ejecutivo de esta caja de ahorros catalana, José Vilarasau, que presentó ayer por la noche los resultados a los medios de comunicación, destacó el crecimiento de este grupo, cuya vocación es la de extender su presencia en España, sin pensar en un expansión internacional.

En este momento, el grupo, en el que ya está plenamente integrado el Banco Herrero y casi totalmente el Banco Granada Jerez, dispone de 3.343 oficinas, de las que 1.833 se encuentran en Cataluña y Baleares y 1.215 en el resto de España. En el extranjero disponen en la actualidad de 69 oficinas.

Vilarasau manifestó que la expansión continuará en los próximos años a un ritmo de apertura de 150-200 oficinas al año, sin que estén considerando en este momento la posible expanión mediante la compra de entidades.

Las participaciones empresariales del grupo bancario catalán ascienden ya a 513.900 millones de pesetas de valor contable. Entre estas, las más significativas son las de Telefónica, de la que posee un 5%, y Repsol, con otro 5%, compañías ambas candidatas a una pronta privatización total.

Vilarasau confirmó la voluntad de La Caixa de permanecer en el accionariado de Telefónica de forma estable, y recordó que precisamente esa ha sido en los últimos años su estraegia no sólo en este caso, sino en el resto de las participaciones industriales.

En este sentido, desveló que sólo en las principales participaciones -Gas Natural, Acesa, Telefónica, Repsol, Aguas de Barcelona, Hidrocantábrico, Banco Portugués de Investimento, Saba e Ibérica de Autopistas, cuyo valor contable total asciende a 341.000 millones- existen unas plusvalías latentes de 427.000 millones de pesetas.

La inversión crediticia creció en 1996 un 7,8%, hasta alcanzar un saldo de 4,220 billones e pesetas. La morosidad de la cartera de créditos es del 3,83%, frente al 4,56% del ejercicio anterior, con una cobertura del 56,57%, que se eleva notablemente por encima del 100% con las garantías hipotecarias.

Vilarasau destacó que en esta entidad la cartera de créditos hipotecarios es especialmente relevante y muy superior a la de los grandes bancos, lo que explica la diferencia de cobertura sin garantías entre La Caixa y los grandes bancos.

Los recursos propios de la entidad ascienden a 560.60 millones, con un superávit de 156.800 millones respecto a los requeridos por la normativa actual.