Caixa Catalunya explica que la etapa expansiva de la construcción registrada en 1998 se ha prolongado en los primeros meses de 1999, hasta registrar avances del PIB sectorial del 10,2% en el primer trimestre de este año. Este fuerte crecimiento se ha debido al dinamismo del valor de los trabajos realizados por las empresas constructoras y a la consolidación de la obra civil.

Sin embago, el Servicio de Estudios de esta entidad advierte de que el menor ritmo de aceleración de los trabajos realizados, unido a otros registros más moderados de la actividad sectorial de los últimos dos meses, "estaría confirmando la asunción de un máximo cíclico de la construcción en el primer semestre del año".

En concreto, el informe de Caixa Catalunya destaca la progresiva contención de la producción de materiales de construcción, que con un aumento del 4,4% en los primeros cinco meses del año se siúa muy lejos del 13,6% alcanzado en los mismos meses del 98, y la estabilidad en el crecimiento de las ventas interiores de cemento en tasas cercanas al 18%.

Esta moderación en la trayectoria expansiva del sector de la construcción también se aprecia en el clima de confianza de los empresarios, que ha alcanzado en mayo el nivel más bajo de los últimos doce meses. Este menor optimismo de los empresarios responde en buena parte, según los expertos de Caixa Catalunya, a la contención del nivel de la cartra de pedidos y a la previsión de una significativa desaceleración del empleo del sector en el segundo semestre del año.

De hecho, añade el citado estudio, la afiliación a la Seguridad Social en el sector de la construcción ha retomado en junio el camino de la contención (14,6%), situando entre diciembre de 1998 y febrero de este año los máximos cíclicos de esta fase expansiva. Para Caixa Catalunya, la madurez del ciclo expansivo del sector queda reflejada también por la evolución menos acelerada prevsta tanto de los visados de obra como de la licitación oficial.

A juicio de Caixa Catalunya, la moderación de la demanda de vivienda y las crecientes tensiones en precios de venta y en costes llevarán a la edificación a ceder parte del liderazgo del avance a la obra civil.