Según el "Informe Trimestral sobre el Consumo Privado en España", editado por dicha entidad financiera, el aumento en exceso del gasto de las familias podría tener repercusión sobre la evolución de los precios y el reparto de recursos.

Este estudio afirma, no obstante, que mienras el consumo privado crezca por debajo del PIB, no es previsible que aparezcan tensiones por esta causa, pero señala que el aumento excesivo del gasto de los españoles afectaría a la economía a dos niveles.

Por una parte, los bienes duraderos y los servicios podrían encarecerse, ya que son los componentes del IPC más sensibles. Por otra parte, podría producirse un cambio en la distribución de los recursos entre la demanda externa y la interna.

El informe recuerda que el elemento más importante n el proceso de ajuste que ha vivido la economía española desde la crisis de 1993 ha sido el cambio de distribución de los recursos desde la demanda externa a la interna.

Según Caixa Catalunya, en el nuevo marco instaurado por el euro, España necesita más que nunca mantener elevados niveles de competitividad internacional y destinar un volumen creciente de recursos a la exportación y a la inversión para garantizar el crecimiento futuro.