Así lo defendió Bustinduy en el transcurso de una entrevista en laSexta recogida por Servimedia y en la que aseguró que dicho plan contempla la “derogación de los delitos de opinión”, lo cual, según su punto de vista, “incluye los delitos contra los sentimientos religiosos, contra todas las instituciones del Estado, incluida también la Corona”.

Tras lamentar que en España “vivimos instalados en una hipérbole constante que no por ser previsible deja de ser menos preocupante”, el ministro puntualizó que el plan presentado “es un punto de arranque, es el inicio de algo muy loable”, en referencia a un conjunto de medidas que, a su juicio, persiguen “intentar preservar, defender y fortalecer el derecho a la libertad de expresión, mejorar en transparencia en todas las instancias de la vida pública y luchar contra la desinformación”.

En este sentido, denunció que, desde hace años, “no solo en España”, sino “en el mundo entero”, las democracias “se ven cada vez más desestabilizadas y asediadas por esta combinación de operaciones de lawfare, bulos, desinformación”. “Y está muy bien que una democracia consolidada como España se plantee qué se puede hacer para proteger nuestra esfera pública, que es de lo que se trata”, apostilló.

En la misma línea, como titular de Derechos Sociales, estimó que, en un contexto de “crisis de las democracias”, está “muy bien” adoptar “todas las medidas necesarias” para “poder proteger” la libertad de expresión, de información y la “salud de la vida democrática”, si bien consideró que “la reflexión que tenemos que hacer es que la mejor manera de fortalecer nuestras democracias frente a los intentos de desestabilizarlas es profundizar en nuestro Estado del bienestar”.

“Porque los derechos sociales, el bienestar social, la justicia social, la redistribución de la riqueza, es la base sobre la que se ha asentado la estabilidad de nuestros sistemas democráticos”, abundó.

En este punto, el ministro advirtió de que esta “agenda de regeneración democrática” que juzgó “prometedora”, convencido de que “está muy bien hacerla”, debe también “ir de la mano” con una “profundización de la redistribución de la riqueza y de la mejora de las condiciones de vida de las mayorías en nuestras democracias”. “Sólo así conseguiremos hacerlas más sólidas, más fuertes y que tengan un futuro más próspero”, subrayó.

DELITOS DE OPINIÓN

Preguntado por las dudas en torno a la derogación de las injurias a la Corona, Bustinduy afirmó que es “previsible” que, en la vida política, se den “situaciones” en las que “cada actor dice una cosa”, si bien explicó que este plan “incluye la derogación de los delitos de opinión”.

“Y eso incluye los delitos contra los sentimientos religiosos, contra todas las instituciones del Estado, incluida también la Corona”, sentenció, para recordar que se trata de “un compromiso, una promesa electoral” que se “tradujo” en un acuerdo de Gobierno, además de “un primer paso hacia la derogación de esa 'Ley Mordaza'”.

A este respecto, hizo hincapié en el “enorme consenso” que existe en España en torno al “retroceso democrático que supuso”. “Y es verdad que se está tardando tiempo en conseguirlo, pero hoy se dan más pasos para avanzar hacia ello”, resolvió.