Temporal

Bustinduy cree que las “responsabilidades” tras la DANA “tendrán que ser dirimidas con luz y taquígrafos”

- Pide extraer “aprendizajes” y advierte de que el negacionismo climático “es un peligro y una amenaza”

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, aseveró este jueves que las “responsabilidades de cada quién” en la gestión de la DANA “tendrán que ser dirimidas con luz y taquígrafos” y pidió extraer “aprendizajes” de esta catástrofe, al tiempo que advirtió de que el negacionismo climático “es un peligro y una amenaza”.

Así lo precisó durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados en el seno de la Comisión Mixta para la Coordinación y Seguimiento de la Estrategia Española para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), a petición del Grupo Parlamentario Popular en la Cámara Baja y con el fin de explicar el camino que piensa impulsar el ministerio para adaptar la estrategia española para alcanzar los ODS tras la aprobación de la Resolución 79/1 de Naciones Unidas sobre el Pacto para el Futuro.

Para Bustinduy, “independientemente de la aclaración y la exigencia de las responsabilidades de cada quién, que, con luz y taquígrafos, tendrán que ser dirimidas en todas las sedes necesarias” tras la DANA, se impone extraer “aprendizajes”, como el “necesario desarrollo de herramientas e instrumentos que permitan, de manera inmediata, reaccionar a estas situaciones y desplegar un Estado social capaz de lidiar con ellas”.

Tras asegurar que “hay mucho que hacer y aprender”, defendió la necesidad de “reconstruir” las “infraestructuras y las capacidades sociales”, teniendo en cuenta, además que más de 120 centros de servicios sociales han resultado dañados en la Comunidad Valenciana.

Bustinduy comenzó su intervención trasladando su “apoyo y acompañamiento” a los afectados por la DANA y expresando el “compromiso” del Gobierno para “acompañar” no solo en la respuesta “inmediata”, sino también en la “reconstrucción y relanzamiento económico y social” de las zonas afectadas.

DESDE EL PRIMER INSTANTE

A este respecto, reivindicó que, “desde el primer instante”, su departamento ha estado en contacto con las autoridades competentes en la Comunidad Valenciana y “desplegando todos los medios disponibles” y así lo seguirá haciendo “todo el tiempo que sea necesario” para poder “contribuir al pilar social de ese plan de reconstrucción y relanzamiento”.

En este punto, explicó que su “labor específica” es “doble” y que su cartera está trabajando para “reforzar” una red de protección social “a la altura de las enormes necesidades que ha causado esta emergencia” y, junto a ello, juzgó “una evidencia” que episodios como este, “con toda probabilidad, van a multiplicarse”.

“Es una evidencia, y debemos atender las señales y alertas que nos llegan desde Bakú -sede de la COP29-, que asistimos a una profundización acelerada de la emergencia climática; que se siguen batiendo, con mayor celeridad de la prevista, todos los récords de temperatura del planeta y de los océanos; que se suceden las sequías prolongadas, los incendios devastadores, olas de calor de una intensidad cada vez mayor, inundaciones como la que, desgraciadamente, hemos tenido que sufrir en estas semanas y otros fenómenos anómalos que azotan cada vez con mayor dureza a nuestros pueblos y ciudades”, abundó.

Por todo ello, consideró “evidente que debemos actuar, no solo para paliar los daños devastadores que generan estos fenómenos, sino para prepararnos, adaptarnos y mitigarlos a futuro”. “Y debemos hacerlo en un escenario particularmente complejo, porque la crisis climática no avanza de manera aislada, sino que interactúa con toda otra serie de crisis múltiples, cada una de las cuales tiene dimensión social, tiene efectos y consecuencias sociales”, prosiguió.

“No se trata solo de abordar los efectos sociales de los fenómenos climáticos, sino de adaptar nuestras formas de vida y, específicamente, nuestras herramientas, dispositivos y la arquitectura de nuestras redes de protección social para que estén a la altura del tipo de impacto, incertidumbre e inseguridad que generan las modulaciones impredecibles del entorno en el que vivimos y, además, debemos hacerlo en un entorno internacional también caracterizado por su complejidad, volatilidad y por unos niveles de violencia que asustan y causan estupor”, sentenció.

NEGACIONISMO CLIMÁTICO

Por lo que respecta al negacionismo climático, insistió en que “es un peligro para España, para la democracia y una amenaza que tenemos que enfrentar”. “Y es una amenaza, además, dirigida especialmente contra los más vulnerables”, alertó, al tiempo que recordó que casi la mitad de las personas fallecidas por la DANA en Valencia tenían más de 70 años, “a pesar de que esta población representaba solo el 15% de la población de las zonas afectadas”.

Asimismo, puntualizó que, de los 700 municipios que, en España, están en peligro de inundación fluvial, el 42% tienen una tasa de población en riesgo de pobreza extrema “muy superior a la media nacional”. “Y pasa lo mismo en el mundo entero: la población socioeconómicamente más vulnerable es la más expuesta a los efectos del cambio climático, pero es que, además, esa vulnerabilidad se multiplica con cada uno de estos impactos climáticos, con cada una de estas situaciones”, agregó.

Por este motivo, estimó “importante” transmitir un “mensaje bien claro: contra el negacionismo climático, datos, ciencia, políticas públicas, protección social, bienestar”. “Respuestas también contra la infamia, respuesta al acoso al que están siendo sometidos los trabajadores voluntarios del tercer sector, por ejemplo, de la Cruz Roja, que es algo miserable y absolutamente intolerable”, sentenció, en referencia a los bulos auspiciados por la ultraderecha.

“Y hay que señalar a las huestes de la desinformación de la extrema derecha y hay que decir lo que buscan, que es desarticular la sociedad civil para intentar suplantar a estas organizaciones, subyugar e instrumentalizar los sentimientos de vulnerabilidad, desprotección o incertidumbre”, denunció.

En este contexto, valoró que la “única manera de responder a estos proyectos basados en la desinformación, en la intoxicación y en el odio” es “dar una respuesta real desde las políticas públicas y garantizar la estabilidad y cohesión social”, algo que, a su entender, “solo se puede hacer reformulando y refundando un Estado del bienestar a la altura de las necesidades que tenemos”.

UN AÑO DE GOBIERNO

En este sentido, coincidiendo con la conmemoración del primer aniversario del actual Ejecutivo, Bustinduy llamó a “huir del triunfalismo” y, en lugar de “poner lacitos a los avances” alcanzados a lo largo de este año, quiso “enfatizar todo lo que falta por hacer”, convencido de que “los derechos sociales no son solo una forma de protección frente a amenazas o emergencias, sino el pilar fundamental que debe regir todas las políticas públicas”.

En la misma línea, y, en relación al objeto de la comisión, tildó de “especialmente reseñable” que el Pacto por el Futuro, refrendado en septiembre, “haya podido ver la luz en este contexto tan difícil, donde los principios mismos del orden multilateral están siendo sacudidos cuando no amenazados” en un “panorama complejo, inquietante, peligroso”, consciente de que “avanzar hacia el cumplimiento de los ODS es sinónimo de avanzar hacia una resolución democrática, pacífica de estas crisis que nos asolan”.

En paralelo, quiso subrayar la “necesidad redoblada” de que, ante las “amenazas que nos rodean”, España “siga siendo una excepción a las lógicas de caos, violencia, desorden que, desgraciadamente, se multiplican por el planeta”. “Y creo que la mejor forma de hacerlo es refundando el Estado de bienestar, refundando consensos políticos y sociales comprometidos con esa idea de dignidad, de justicia social y de igualdad”, resolvió.

(SERVIMEDIA)
21 Nov 2024
MJR/clc