Los accionistas de Abertis y Autostrade mantienen el convencimiento, pese a las reticencias del Gobierno italiano a la operación, de que la misma acabará saliendo adelante.

La Comisión Europea ya ha intervenido contra Italia y ahora está pendiente de contestar al Ejecutivo de Romano Prodi sobre la carta que envío a Bruselas el pasado martes explicando sus reparos a la entrada de una constructora, ACS, accionista de Abertis, en el capital de una concesionaria de autopistas como Autostrade.

El grupo que pueda resultar de la unión de la empresa española y la italiana será líder en el mundo en concesiones de infraestructuras, con una capitalización cercana a los 25.000 millones de euros.

El primer accionista de la nueva sociedad será el grupo Benetton, a través de la sociedad Schemaventotto, con un 24,9% de las acciones.

ACS, con un 12,5% del capital, "la Caixa", con un 11,7%, y Caixa Catalunya, con un 2,9%, liderarán la presencia española en el accionariado de la empresa, al que se une el 2,8% adicional en posesión de un grupo de cajas.

El capital flotante o "free float" de la sociedad fusionada será del 44,6%.