Según informó hoy la propia Comisión, desde Bruselas se ha enviado un dictamen a España en relación con dicha prohibición, donde se le pideque permita la venta de productos elaborados con guaraná, al considerar que la decisión del Gobierno valenciano "obstaculiza la libre circulación de mercancías en el seno de la Unión Europea".

En opinión de las autoridades españolas, el guaraná es un medicamento y, por lo tanto, la venta de productos que lo contengan debería estar sujeta al dictamen previo de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios.

A este respecto, Bruselas sostiene que "existe una ausencia de elementos cientíicos que permitan demostrar el fundamento de su postura", sobre todo "cuando en otros lugares de España se comercializan libremente productos similares (bebidas y helados) con contenido en guaraná".

De esta forma, la Comisión considera que la prohibición impuesta por Valencia es "desproporcionada" en relación con el objetivo de protección de la salud de las personas, al considerar que dicho objetivo "se podría alcanzar con el etiquetado adecuado".