Para el ministro, "el PSOE siente un enorme respeto por quienes han ejercido el derecho a la huelga y el Gobierno comparte la preocupación frente a la crisis y el fenómeno del paro", aunque precisó que el paro del 27-E no es fue la mejor forma para expresar este temor.

Borrll defendió la reforma del mercado laboral porque, a su juicio, "está orientada a combatir el paro, crear y mantener el empleo" y recordó que representantes del Ejecutivo han intentado alcanzar un consenso con los agentes sociales, "pero, cuando se acaba el periodo negociador, el Gobierno tiene la responsabilidad de hacer lo que cree que debe hacer".

Sobre las discusiones precongresuales entre miembros del PSOE, aseguró que "los debates siempre son entre personas, es de ideas pero entre personas, y ha que saber quien lo dice", aunque no quiso entrar en detalles sobre los tiras y aflojas entre el ex ministro del Interior, José Luis Corcuera, y el presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina.

Por otro lado, precisó que, con sus reiterados comentarios sobre el coste de las infraestructuras, sólo pretende advertir que "haba que buscar fórmulas de financiación más adecuadas" que las actuales, que recaen principalmente sobre los Prespuestos del Estado.

"Algunas infraestructuras", dijo, "la pagan los usuarios como los puertos, aeropuertos y autopistas de peajes, otras los contribuyentes, y otras a medias como en Galicia y hay que mantener ese esfuerzo inversor, pero no me corresponde a mi hablar de impuestos", señaló Borrell.