No obstante, José Borrell considera que las predicciones realizadas por algunos expertos en relación con el cambio climático, que prevén el aumento del nivel del mar, el incremento de las temperaturas y la necesidad de cambiar los cutivos en diversas zonas de la Tierra, no son "ninguna tontería".

A su juicio, las variaciones climáticas que sufrirá la Tierra durante los próximos años como consecuencia de las actividades humanas son "un tema noticiable, atractivo".

José Borrell recordó que durante los próximos 50 años "seremos el doble de gente y podemos cuadriplicar la población antes de que hayamos tenido tiempo de tomar medidas correctoras".

"Si el señor de Bangladesh", agregó, "emitiera el mismo nivel de CO2 que emiteel ciudadano medio del mundo occidental, las emisiones de CO2 se multiplicarían por dos. Dentro de 50 años, cuando seamos el doble de población que somos ahora, echen ustedes cuentas".

El ministro español expresó su preocupación por la explosión demográfica que experimentarán los países del norte de Africa y advirtió que "no va a conocer fronteras y está a las puertas de nuestras sociedades envejecidas e instaladas en su bienestar material".

LA "CUMBRE" DE RIO

El titular de Obras Públicas y Trasportes, que viajará el próximo día 10 a Río de Janeiro (Brasil) para asistir a las últimas reuniones de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, reiteró que hay que evitar el pesimismo en el transcurso de la "cumbre".

Sin embargo, reconoció que la decisión de EE.UU. y Japón de no suscribir el convenio sobre diversidad biológica condiciona el futuro de la reunión.

"Estamos ante un problema", dijo, "que requiere liderazgos políticos, que requiere locomotoras, países másactivos políticamente que otros, para arrastrar a las opiniones públicas y condicionar las posiciones políticas de los respectivos gobiernos".

Borrell señaló que España apoya los convenios de cambio climático y biodiversidad y añadió que habrá que esperar a la "cumbre" de Río para saber si Gran Bretaña secunda las tesis comunitarias o las de EE.UU.

Asimismo, negó que en la reunión de Brasil todo esté ya decidido, como ha manifestado recientemente el comisario europeo de Medio Ambiente, Carlo Ripadi Meana, y aseguró que confía en que éste acuda finalmente a Río de Janeiro.

El máximo responsable de la política medioambiental española declaró que la conferencia tiene que demostrar que los problemas conservacionistas deben ser tenidos en cuenta cuando los gobiernos adopten decisiones económicas.

Respecto al caso español, insistió en que los principales problemas ecológicos que sufre nuestro país son la escasez y calidad del agua y la erosión, que provoca la pérdida de productividad del suelo

Finalmente, confirmó que España aportará 1.400 millones anuales al Global Environmental Facility, el nuevo fondo mundial para solucionar los problemas ambientales de ámbito planetario que debe salir de Río de Janeiro.