En declaraciones a Onda Cero, Borrell respondió en estos términos al preguntarle si, en el supuesto de alcanzar el Gobierno sin mayoría absoluta, preferiría pactar con Izquierda Unida o con los nacionalismos periféricos.

"A mi me gustaría, obviamente, gobernar desde la izquierda, pero claro si, por ejemplo, Izquierda Desunida (sic) me pone como aternativa para gobernar que nos salgamos del euro, comprenderá usted que no es posible", explicó.

Por otra parte, Borrell dijo que Jordi Pujol "es el peor embajador de Cataluña en el resto de España", y se mostró convencido de que usa el victimismo para perpetuarse en el poder.

Borrell señaló que es posible que a Jordi Pujol no le quieran fuera de Cataluña, pero ése no es el caso general de los catalanes, y añadió que él ha viajado por España señalando que hay que respetar la identidad política, ultural y lingüística del pueblo catalán "y la gente lo entiende perfectamente".

Borrell aprovechó para animar a Pascual Maragall a presentarse para ser el candidato del PSOE a la Generalitat y derrotar a Jordi Pujol.

"Va a ser muy difícil que se resista a colaborar en un proceso que tiene hoy en día unas expectativas impresionantes. En política, para ganar hay que arriesgarse a perder, y creo que Pascual tiene muchas posibilidades de ganar, pero tendrá que asumir algún riesgo", indicó.

Sobr el nuevo modelo de organización que es necesario montar en el PSOE tras el resultado de las primarias, Borrell señaló que él y Joaquín Almunia tienen la obligación de entenderse para repartir los papeles que corresponde a cada uno.

Borrell señaló que a él le corresponde asignar las funciones para los temas electorales y al secretario general las cuestiones relacionadas con la dirección del partido. Añadió que ésta convencido de que nadie en la dirección socialista intentará boicotear la nueva etapa qe surge tras las primarias.