Así lo manifestó Josep Borrell durante un encuentro organizado por Nueva Economía Fórum en la capital comunitaria, en el que Borrell afirmó que para poder disuadir la amenaza de un conflicto que afecte al viejo continente “necesitamos tener los medios” para hacerlo.

Borrell subrayó que, de cara al futuro, “la posibilidad de una guerra convencional de alta intensidad en Europa ya no es una fantasía” y recordó que cuando asumió su puesto de Alto Representante ya aseveró que Europa necesitaba aprender a utilizar el lenguaje del poder.

En la misma línea, el vicepresidente de la comisión confesó que cuando presentó la ‘Brújula Estratégica’, el documento para la estrategia de defensa de los 27 y aprovechó la ocasión para decir que Europa estaba en peligro, la gente se sonrió y cuestionó que “estaba vendiendo su negocio”.

A juicio de Borrell, lo que está pasando actualmente en Ucrania y en la Franja de Gaza “es el viejo conflicto por la tierra”, y lamentó que con la globalización se impuso la creencia de que las fronteras desaparecían como motivo de disputas.

Tras la caída del Muro de Berlín, señaló, los europeos creyeron que se encontraban en un mundo rodeado de amigos, y ahora se dan cuenta de Europa en verdad está rodeada “por un círculo de fuegos”, desde el Sahel hasta el Medio Oriente, al Cáucaso y los países bálticos.