MADRID

BONO GARANTIZA EN AFGANISTÁN "JUSTICIA SALARIAL" PARA LOS SOLDADOS

- Proclama ante líderes religiosos que "el derecho a una vida digna está por encima de fronteras, religión e ideas"

HERAT (AFGANISTÁN)
SERVIMEDIA

El ministro de Defensa, José Bono, prometió hoy "justicia salarial" a las tropas españolas destacadas en Afganistán, a las que pidió que sigan como hasta ahora ayudando a construir "un mundo de paz, libertad y democracia".

El ministro, acompañado de una delegación parlamentaria, llegó a Afganistán a bordo de un avión Hércules de la Fuerza Aérea española.

Visitó primero Qala-i-naw, una ciudad que unos 120 soldados españoles ayudan a reconstruir. Allí, Bono se reunió con el gobernador de la región de Badghis, con las autoridades locales, con el Consejo de Ancianos y con el "maulabi", la máxima autoridad religiosa de la provincia.

Ante esta representación de los habitantes de la región, Bono aseguró que el derecho a vivir dignamente está por encima de fronteras, religiones e ideas.

"No hablamos el mismo idioma, no tenemos la misma religión ni vestimos del mismo modo, pero tenemos algo que nos iguala a todos los seres humanos: el derecho, por encima de todas las fronteras, de todas las religiones y de todas las ideas a vivir dignamente".

Bono aseguró que ningún ser humano tiene más derecho que otro y les dijo también que los soldados españoles se encuentran en su tierra para defender la paz, la libertad y la democracia y para ayudarles a reconstruir su país.

CONDICIONES DE VIDA EN AFGANISTÁN

Agradeció además a los habitantes de la zona, unos 50.000 en los alrededores de la base de Qala-i-naw, el afecto que han mostrado a los soldados españoles. En nombre del rey de España trasladó sus mejores deseos a las autoridades locales.

El ministro conversó después con el "maulabi" y paseó por el mercado de la ciudad, apenas unas tiendas donde los ciudadanos intercambian sus mercancias y en el que se ve sin dificultades las paupérrimas condiciones de vida que las autoridades habían explicado antes a Bono: ausencia total de agua potable, electricidad, infraestructuras y sanidad.

Ante Bono habló también una profesora de una escuela de niñas que, tras expresar las necesidades de las mujeres afganas y una vez termiando el acto oficial, se vistió el tradicional "burka" para salir a la calle y con el que se ve a todas las mujeres de la zona.

Con los soldados de Qala-i-naw, Bono compartió un vino español y les pidió que sigan siendo útiles en nombre de todos los españoles que desean serlo para evitar situaciones como los atentados de Nueva York, Madrid o Londres.

Les pidió que sigan reconstruyendo "el país de Bin Laden", el mismo que fue "semillero de terroristas" y en el que las mujeres eran asesinadas por el mero hecho de desear ser libres.

También a los militares españoles trasladó Bono el saludo afectuso del Rey y les agradeció su sacrificio. "Hay cosas impagables", añadió, "pero lo que hay que pagar os juro que os lo pagaremos", "o lo arreglo o me voy", añadió.

Precisó después ante los medios de comunicación que no está dispuesto a seguir tolerando como ministro de Defensa que un brigada con veinte años de servicio gane menos que un policía local recién incorporado en una gran ciudad española.

BASE DE HERAT

Bono dejó en la base una metopa del Ministerio de Defensa y una gran bandera. Después el ministro se trasladó en helicóptero a Herat, donde 649 soldados españoles prestan apoyo a los de Qala-i-naw y donde se están desplegando los que se encargan de prestar apoyo logístico y de seguridad en las elcciones del próximo mes de septiembre y que se replegrán un mes después.

La situación política en la zona no está asegurada pero sí controlada, dicen los mandos militares de la base española, y el terrorismo y el tráfico de drogas son los principales riesgos.

Desde el aire el ministro, pudo comprobar la naturaleza del terreno afgano, completamente árido, montañoso, con apenas una escasa agricultura artesanal y poblados diseminados que apenas han avanzado desde la Edad Media y donde se ven numerosas jaimas de nómadas a los que acompañan camellos y cabras.

Las condiciones de vida de los soldados españoles en Herat son especialmente duras con temperaturas que, en días sin viento, se elevan a 50 grados a la sombra.

Hasta allí Bono llegó acompañado de una delegación de diputados y senadores: Jesús Cuadrado (PSOE), Agustín Conde (PP), Josep Maldonado (CIU), Joan Puig (ERC) y José María Mur (Partido Aragonés).

A todos ellos, el ministro les invitó a título individual y con la discreción necesaria para preservar la seguridad de toda la expedición mientras permanezca en territorio afgano.

(SERVIMEDIA)
01 Ago 2005
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