Con esa afirmación, Bono denunció en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, la supuesta falta de control de veracidad por parte del PP en la recogida de firmas.

El diputado del PP Manuel Atencia había dirigido una pregunta a la vicepresidenta primera del Gobierno para saber si comparte las opiniones de Bono sobre Pasqual Maragall, pero finalmente fue el propio Bono el que respondió a la pregunta.

"Digo yo que cuando sigo en el Gobierno no debe estar muy en desacuerdo y además cuando me encomienda que en su nombre sea yo el que responda", dijo Bono.

Atencia aconsejó a Bono "que tenga cuidado" porque los socialistas tienen "barra libre" para atacarle por sus reproches al tripartito catalán, y sentenció que el Gobierno y el PSOE tiene serios problemas de credibilidad.

Bono aseguró en su respuesta que tiene opiniones y criterios y trata de expresarlos "con respeto y claridad". "Mi creencia en que la única nación que cabe, jurídicamente hablando, en la Constitución es España, no es un dardo ni contra Cataluña ni contra nadie, es mi convicción".

Argumentó que pertenece a un partido "donde hay libertad para tener opinión, se puede discrepar sin que le manden a uno al Banco Mundial para no hacer sombra al jefe". "Aquí no hay uno que piense por los demás, ni hay ninguna fundación para que ninguno piense", añadió.

Bono criticó al PP por denunciar sus opiniones cuando piden las de todos los ciudadanos en un referendum para el cual "les ha firmado Spiderman, les ha firmado Superman. ¿No podrá el ministro de Defensa decir lo que quiera?".

Si lo que desea el PP es "buscar conflictos en Cataluña o parejas en conflicto", concluyó Bono, la sugerencia es que lo hagan en su propio partido, por ejemplo "Piqué-Acebes".