Así lo afirmó durante una entrevista concedida a Servimedia en la que estimó que el crecimiento del PIB será del 2,4% para el cierre de 2024, cuatro décimas más que la anterior proyección, y del 2% para 2025, una décima más. Destacó el gran crecimiento que ha vivido España en los últimos 50 años y mostró su optimismo de cara al futuro. "En España, en 1975 teníamos 3.000 dólares de renta per cápita, hoy tenemos 30.000", recordó Bonet, quien afirmó que si España incide con la tenacidad necesaria, "tiene mucho que ganar".

Explicó el crecimiento que está experimentando ahora la economía por el auge del turismo y del comercio exterior. Sin embargo, alertó sobre todos aquellos sectores productivos que no se han visto beneficiados por la ola del turismo, como pymes o empresas familiares que "no han podido repercutir" la inflación o el impacto de los tipos de interés teniendo deudas. "Les pone en una situación difícil y eso no es nada bueno, las pymes no pueden replegarse, amilanarse, tienen un recorrido grande que hacer", señaló.

Preguntado por la reducción de la jornada laboral que en estos momentos negocian sindicatos, patronal y Ministerio de Trabajo, señaló que hay empresas a las que puede causar un grave perjuicio. Consideró que hay que "profundizar, estudiar, negociar y llegar a acuerdos". Dijo que le "alegra" que "parece que se está ahora en disposición de entrar en esa negociación" y que no cree en "imposiciones e intervenciones".

Sobre las opciones de que el ministro de Transformación Digital y Función Pública, José Luis Escrivá, se convierta en el próximo gobernador del Banco de España, Bonet puso en valor el "magnífico" trabajo del gobernador saliente, Pablo Hernández de Cos, y pidió al Gobierno prudencia y diálogo. "Me parece muy acertada la posición que ha tomado Carlos Cuerpo de afirmar que no tienen prisa y que todavía tienen que hablar", señaló Bonet.