Así pues, la compañía explicó en una nota de prensa que la localidad hispalense se convierte en la séptima ciudad española en la que se podrán utilizar sus servicios de micromovilidad, después de Barcelona, Oviedo, Zaragoza, Málaga, Sanlúcar de Barrameda y Paterna.

Para esta expansión, la compañía invertirá siete millones de euros durante estos próximos tres años. Asimismo, instalará estaciones de carga para patinetes y bicicletas eléctricas basadas en un diseño y producción propia, que ayudará a las ciudades a implantar sistemas de transporte urbano más "seguros, ordenados y sostenibles".

El director regional de micromovilidad de Bolt en el Sur de Europa, Paul Álvarez, agradeció a la ciudad de Sevilla la confianza depositada en Bolt y aseguró que están deseando empezar para dar forma a unos hábitos de uso responsable de la micromovilidad en los próximos años.

"Nuestra misión desde Bolt es ofrecer opciones de movilidad compartida asequibles a nuestros clientes, a la vez que ayudamos a transformar las ciudades en lugares más sostenibles que pongan al ciudadano en el centro, reduciendo la dependencia de los vehículos privados y democratizando nuevas opciones de transporte", afirmó.