Las alzas en el sector bancario, junto con la ayuda de las telecomunicaciones y las constructoras, llevaron al índice de Madrid a ganar una parte de lo perdido ayer y situarse en el 356,47 por ciento, después de una subida de 5,2 puntos.

Por otro lado, el índice Ibex se colocó en 3.946,99 puntos, tras ganar 50,11. En este segundo día de cotización de Banesto, ha estado sujeto a los topes de cotización al alza o a la baja del 15 por ciento, igual que el resto de losvalores, después de que ayer el banco abriera sin ese límite con una caída del 60 por ciento.

Banesto volvió a abrir al alza con un avance de 30 pesetas respecto a la cotización de ayer y cerca de 300.000 títulos negociados en pocos minutos. Durante toda la sesión la actividad fue frenética y el banco se constituyó en uno de los valores más negociados en número de títulos, mostrando una alta volatilidad, que osciló entre las 898 pesetas alcanzadas en la última media hora de la sesión y las 860 poco depués de la apertura.

El banco mantiene una cotización que duplica el futuro valor nominal, fijado en 400 pesetas, y que debe ser aprobado por la junta general de accionistas. Banesto negoció 2,2 millones de acciones viejas y cerca de 700.000 de acciones nuevas, con lo que en las dos últimas sesiones se ha movido cerca de un 5 por ciento de su capital. La contratación en pesetas alcanzó los 1.983 millones.

Los expertos se muestran divididos a la hora de argumentar las subidas que se producen en elvalor y destacan el alto componente especulativo existente. La marcha del valor va a depender de las condiciones de la próxima ampliación de capital prevista de 180.000 millones y de la existencia o no de una prima, su cuantía, y de que los accionistas cuenten o no con derecho de suscripción preferente. Demasiados elementos que hacen que sea complicado explicar cómo el valor se ha acomodado por encima de las 800 pesetas.

El resto del mercado, con Telefónica a la cabeza, que continúa imparable por encia de las 2.000 pesetas, ha recobrado los ánimos alcistas a la espera de las decisiones de mañana del Bundesbank en torno a su política monetaria.

Las compras se extendieron prácticamente por todos los sectores y la actividad continuó siendo frenética y repleta de especulación. La negociación global alcanzó los 48.420 millones de pesetas.

Entre los valores de segunda fila destacó la actividad de Altos Hornos de Vizcaya y, pese a que sus acciones no valen nada puesto que la empresa está en plena opración acordeón, se hicieron transacciones de 22 a 27 pesetas y se intercambiaron más de 3 millones de títulos.

En los mercados monetarios, los inversores no parecen tan convencidos de una rebaja del precio final del dinero alemán y hoy se han mostrado algo más nerviosos, coincidiendo también con el final de decena bancaria en España.

Asimismo, se han producido algunas tensiones en el mercado interbancario, mientras que las obligaciones a diez años se situaban en rentabilidades del 7,8 por ciento frente al 7,77 de ayer, con los consiguientes descensos de los precios. Los mercados están atentos a las subastas de deuda pública a medio y largo plazo que celebra mañana el Tesoro en España.