Comprar por la mañana y vender por la trde, o a los pocos minutos, para recuperar la ganancia es la lógica de los inversores tras los sucesivos máximos históricos conseguidos, sin que la economía real fundamente estos avances. La única expectativa latente y que sirve de explicación a las subidas es que bajen los tipos de interés, pero por ejemplo, este jueves el Bundesbank lo tiene muy difícil para reducir el precio del dinero, sobre todo por la debilidad de su moneda.

De los movimientos especulativos daba cuenta una negociación que ha suprado los 43.900 millones de pesetas. El índice de Madrid cerraba perdiendo 23 centésimas y se situaba en 336,16 por ciento, mientras que el Ibex se colocaba en 3.729,12 tras perder 7,24 puntos.

El sector eléctrico es sin duda el más dinámico, con Endesa a la cabeza de los avances. la eléctrica ganó posiciones tras conocerse que está prevista una próxima colocación de acciones, nueva privatización, de hasta un 20 por ciento de su capital, para la próxima primavera. Iberdrola, en cualquier caso, era el alor más negociado con 3,8 miloones de títulos. Constructoras, telecomunicaciones y bancos impidieron que a última hora el índice se anotara ganacias.

En la jornada de hoy, descontaron dividendo Tabacalera, Saltos del Nansa, Inversiones Herrero, Banco Herrero e Inmobiliaria del Sur. En el mercado interbancario, el Banco emisor inyectó 3,8 billones de pesetas al 9,05 por ciento, mientras que en el mercado de deuda los extranjeros provocaban una nueva valancha compradora que situaba las obligaciones a dez años en rentabilidades por debajo del 8 por ciento en algunos momentos de la sesión, 0,50 puntos por debajo de la última subasta, en una apuesta clara por unos tipos de interés más baratos.

La peseta era objeto de compras y se apreciaba frente al marco en 42 céntimos para pagarse a 82,03 pesetas, al igual que ocurrió contra el dólar. La divisa estadounidense se depreciaba en 73 céntimos y cotizaba a 143,85 pesetas.