Esta reorganización en el departamento que dirige Miguel Ángel Moratinos se aprobó el pasado 8 de septiembre en Consejo de Ministros. Esta modificación supone la desaparición de la Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores y para Iberoamérica, que dirigía Bernardino León, al quedar dividida en dos Secretarías.

Por su parte, León continúa como "número dos" de Exteriores,ya que será el encargado de asistir directamente al ministro en la formulación y ejecución de la política exterior de España y asegurar la coordinación de las distintas Secretarías de Estado del Departamento al frente de la Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores.

Mientras, la recien creada Secretaría de Estado para Iberoamérica será la encargada de asesorar directamente al ministro en la formulación y ejecución de la política exterior de España para Iberoamérica, según un comunicado de Exteriores.

Con la nueva estructura, el Gobierno desea hacer especial hincapié en la importancia que atribuye esta región en nuestra política exterior.

También, pone de manifiesto la voluntad de impulsar el desarrollo de la Comunidad Iberoamericana de Naciones y fomentar la presencia y participación de España en los distintos organismos internacionales multilaterales de esta zona.