La caída de resultados obedece a los menores beneficios netos en los valores, menores ingresos por colocación y aseguramiento de emisiones, mayores comisiones satisfechas y menores ingresos financieros.

De la cifra total de beneficios, 2.23 millones correspondieron a las sociedades de valores y 777 a las agencias. La diferencia entre unas y otras radica en que las segundas sólo pueden operar, salvo excepciones, por cuenta ajena, por lo que sus riesgos suelen ser inferiores.

El activo total de estas entidades ascendía a finales del primer trimestre a 362.224 millones de pesetas. Su cartera de negociación se elevaba a 278.707 millones, de las que más del 95 por ciento corresponden a renta fija.

Las inversiones dudosas o morosas de ociedades y agencias se situaron en 1.900 millones, con un nivel de cobertura del 64,5 por ciento, ya que las provisiones para insolvencias totalizaban 1.226 millones.

El empeoramiento de los resultados en el primer trimestre se tradujo en un recorte de plantillas, con una disminución global de 50 trabajadores.

SUBIO EL INDICE

Por otra parte, la CNMV destaca que el volumen contratado en las bolsas de valores experimentó un pequeño incremento respecto al último trimestre de 1991 y que el índice e la Bolsa de Madrid se revalorizó en torno al 4 por ciento.

Las emisiones registradas en al CNMV disminuyeron en valor efectivo en torno al 25 por ciento respecto al trimestre anterior. Por contra, el patrimonio de los fondos de inversión tuvo un crecimiento espectacular, superior al 35 por cien.