No obstante, en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2007 el Gobierno matiza que la reforma fiscal del próximo año no afecta al presupuesto de beneficios fiscales.

Esto se debe, explica Hacienda, a que "la repercusión recaudatoria de los beneficios fiscales se evalúa en el momento de liquidar cada tributo, lo que significa que los cambios normativos que comiencen a aplicarse en 2007, como consecuencia de la citada reforma, incidirán en el Presupuesto de Beneficios Fiscales del ejercicio 2008".

El conjunto de los beneficios fiscales destinados a facilitar el acceso a la vivienda y fomentar la edificación constituyen el principal elemento de beneficios fiscales, que se lleva un presupuesto de 7.768,54 millones de euros, el 15,03% del total.

La deducción por inversión en vivienda habitual alcanza un presupuesto de 3.787,46 millones de euros, un 13,64% más que en 2006. A la reducción por arrendamiento de viviendas se dedican 218,15 millones, un 22,86% más.

Los beneficios fiscales para fomento del empleo constituyen el segundo capítulo más importante, ya que a él se destinarán 6.647,15 millones de euros, mientras que los ligados a comercio y pymes recibirán 6.622,98 millones.

Hay partidas que registran un notable incremento, como el tipo de gravamen reducido para sociedades de inversión, que crece un 139,09%, a 837,12 millones; y el de pymes, que sube un 62,36%, hasta los 1.228,49 millones.

Es más importante, aunque registra una caída del 37,03%, el presupuesto de la deducción por reinversión de beneficios extraordinarios, que se sitúa en 1.679,58 millones.