Sin embargo, el propio Banco Popular reconoce que este beneficio final se ha visto favorecido por el "menor ritmo de constitución de provisiones derivado de la mejor evolución de la morosidad", ya que, por el contrario, el resultado operativo es inferir incluso al del trimestre inmediatamente inferior, aunque muy ligeramente, en un -0,1 por cien.

El margen financiero del Banco Popular ha descendido un 0,5 por cien respecto al anterior trimestre, aunque la entidad bancaria considera este dato como "una moderación en el ritmo de caída esperado".

El Popular confirma la mejoría de expectativas sobre la base de el menor ritmo de avance de la morosidad, que se sitúa en el 2,90 por cien de los riesgos totales, "tres centésimas por debajo de fín de añ".

Sin embargo, el dato más positivo es el aumento del 2,9 por cien de la inversión crediticia que "parece confirmar los síntomas de recuperación de la demanada de crédito". Con ello, el crédito total del Banco Popular se situa a finales de marzo en 1,73 billones de pesetas, que representa el 78,7 por cien de los recursos de clientes, frente al 73,2 de final de diciembre.

A pesar de esta leve mejoría en el negocio que se aprecia en los datos que aporta la entidad que presiden los hermanos Valls, e confirma la dificultad que las entidades bancarias van a tener este año para siquiera mantener los resultados de 1993, tras conocerse tambien hace unos días las cifras de Bankinter, cuyo beneficio descendió ligeranmente respecto al pasado año.

Precisamente, estos dos bancos, los únicos que han publicado sus resultados trimestrales, son dos de los bancos con más capacidad de generar resultados.