UN BARRIO DE CADIZ SE LEVANTA CONTRA EL TAFICO DE DROGAS Y FORMA PATRULLAS VECINALES PARA IMPEDIR LA ENTRADA DE LOS "CAMELLOS"

CADIZ
SERVIMEDIA

Los vecinos del barrio de Santa María de Cádiz llevan varias semanas "en pie de guerra" contra los traficantes y consumidores de droga que operan en ese distrito, para acabar "con la permanente tensión y las amenazas de los vendedores y consumidores de droga".

La última de estas acciones de protesta ha sido el cierre de la totalidad del comercio del citado barrio desde las siete dela tarde del día de ayer para, según fuentes vecinales, "reclamar mayor presencia policial para luchar contra esta lacra".

La "huelga general", según ha sido calificada por los vecinos, estuvo precedida por una manifestación que discurrió por las calles del barrio y en la que participaron varios centenares de vecinos.

Con anterioridad, representantes de los vecinos se reunieron con la gobernadora civil de la provincia, Violeta Alejandre, quien mostró su apoyo a las movilizaciones vecinales y señaó que reflejan "el rechazo de los ciudadanos ante comportamientos antisociales y actitudes incívicas".

Violeta Alejandre, quien prometió "mejor y mayor conexión con los vecinos" y un incremento de la "presencia policial", se opuso, no obstante, a la patrullas vecinales que vienen funcionando en el barrio desde hace varias semanas.

Estas patrullas están formadas por vecinos del barrio y pretenden bloquear la entrada al mismo de los compradores de droga. Días después de que comenzasen a actuar, numrosos automóviles de la zona aparecieron con los cristales rotos, actos de los que vecinos acusaron a los narcotraficantes.

Según informó la comisión vecinal a su salida de la reunión con la gobernadora civil, la patrullas continuarán funcionando hasta que las autoridades terminen "con el tráfico de heroína, cocaína y hachís que se realiza en el barrio" y que tiene a los vecinos "atemorizados".

(SERVIMEDIA)
20 Sep 1994
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