Según AENA, el nuevo aparcamiento tendrá una capacidad para 3.786 vehículos, lo que elevará las posibilidades de estacionamientode coches en el aeropuerto madrileño a 5.700 plazas.

Para estas obras, el ente público destinará unos 2.000 millones de pesetas, la misma cantidad que destinará a elevar un edificio entre las terminales de vuelos nacionales e internacionales, con una altura de 3 plantas y una superficie total de 11.675 metros cuadrados.

La dirección de Madrid-Barajas prevé instalar en el nuevo inmueble las oficinas de representación de todas las compañías que operan en el aeropuerto, por lo que los metros cuadrads que se liberen con el trasladado serán empleados en la ampliación de los servicios al público, como facturación y llegadas.

AENA acaba de sacar a concurso público la redacción de los dos proyectos técnicos de construcción, y la intención de sus responsables es sacar a concurso las obras e iniciarlas rápidamente.

Estos dos proyectos, según AENA, forman parte de un conjunto de obras iniciadas ya en Madrid-Barajas con el fin de ampliar la capacidad operativa del aeropuerto y absorber los increments de tráfico que se registrarán en los próximos años, hasta que entren en servicio las nuevas pistas y terminales que aprobó recientemente el Gobierno.

Las otras actuaciones en marcha son el desplazamiento del umbral de la pista 33, recientemente concluida, y la ampliación de la plataforma de estacionamiento de aeronaves, tanto en el campo de vuelos como en el de terminales.