Sin embargo, Banque Paribas ha reaccionado de forma inmediata emitiendo un comunicado en el que rechaza de plano los criterios de la Inspección de Hacienda y anincia que recurrirá por todos los medios la actuación inspectora.

La normativa actual exime de retención a no residentes cuando compran deuda pública con un plazo superior a 30 días de antelación a la fecha de pago del cupón.

Sin mbargo, cuando el inversor extranjero adquiere deuda pública en una fecha que dista menos de 30 días de la fecha del pago de cupón, debe practicarse la retención del 25 por cien de la rentabilidad aunque Hacienda devolverá esa cantidad posteriormente.

Con el acta que hoy ha extendido, según reconoce la propia entidad bancaria, la Inspección de Hacienda entiende que han existido estas últimas operaciones sin que la entidad bancaria haya practicado la retención. Esta actuación es similar a la que recienemente efectuó respecto al Banco Luso Español, con un acta que en esa caso ascendía a 17.000 millones.

Sin embargo, Banque Paribas rechaza los argumentos del acta de Hacienda, cuya conformidad no ha firmado afirmando que "en ningún caso ha realizado operaciones de lavado de cupón". Según la entidad bancaria, el acta es una propuesta de liquidación de intereses de demora, "sin cuota a ingresar y sin sanciones, por lo que la actuación inspectora no ha finalizado".

Paribas añade que su actuación "esá dentro de la más absoluta legalidad vigente, sin que haya vulnerado la norma aludida por la Inspección de Tributos, al no resultar de aplicación a las operaciones realizadas".

En su comunicado, Banque Paribas avanza su intención de iniciar "en el día de hoy las actuaciones pertientes en defensa de sus legítimos intereses" en todas aquellas insntancia que considere necesario "con el firme convencimiento de ontener Resolución o Sentencia favorable".

La Inspección de Hacienda no se ha pronunciadohoy acerca de esta actuación.