Según comunicó hoy la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), si se excluyen los ingresos extraordinarios logrados en 2006, el beneficio del banco habría crecido en 2007 un 37,4%.

La inversión crediticia bruta de clientes ha aumentado un 13,6% y presenta un saldo de 63.219,33 millones de euros en relación con el cierre del ejercicio anterior.

Al cierre del ejercicio 2007, la ratio de morosidad sobre el total de la inversión es del 0,47%, si bien ha crecido desde el 0,39% registrado en 2006. Las dotaciones efectuadas sitúan el índice de cobertura sobre riesgos dudosos y en mora en el 394,29%.

El menor crecimiento de la inversión crediticia a clientes explica que las dotaciones netas a provisiones por insolvencias y otros deterioros sean un 13,9% inferiores en términos interanuales.

El margen de intermediación anual suma 1.317,24 millones de euros y es un 20% superior al obtenido en el ejercicio precedente, como resultado del crecimiento de los volúmenes medios de inversión y recursos de clientes.

Los ingresos por comisiones superaron los 630,2 millones de euros, tras aumentar un 14,5%, mientras que los obtenidos de la actividad de seguros mantienen su progresión y alcanzan los 78,4 millones de euros (+31,1%).

Con ello, el margen ordinario, una vez contabilizados los resultados por operaciones financieras, alcanza los 2.196,40 millones y es un 21,2% más elevado que un año atrás.

Finalmente, el margen de explotación consolidado registró el año pasado un incremento del 30,1% sobre el obtenido en 2006.