Así, los responsables de ING Direct, Openbank y Uno-e, que participan en el curso "El nuevo entorno del sector financiero", que se celebra en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, restaban importancia a esta posibilidad.

La supuesta pérdida de negocio sería consecuencia de la falta de confianza de los consumidores en este tipo de entidades, que ofrecen remuneraciones cercanas a las que ofrecían los sellos.

En opinión, del director general de Openbank, Pedro Alonso Gil, se trata de dos sectores completamente diferentes que no tienen ninguna similitud entre si, "y los clientes lo saben".

"Nosotros tenemos una gran institución financiera detrás que nos respalda que es de primerísimo nivel (el Grupo Santander) y eso nuestros clientes lo tienen clarísimo", indicó Gil, tras recordar que las operaciones de este sector están reguladas y supervisadas por el Banco de España.

Por ello, Gil subrayó que la única forma de demostrar esta cuestión es viendo los próximos resultados económicos de la compañía.

Por su parte el responsable de ING Direct, César González- Bueno, eludió pronunciarse sobre el reciente rumor, desmentido por el Banco de España, de una posible intervención judicial, a raíz del escándalo filatélico.

"Los grupos de nuestro tamaño no pueden nunca comentar sobre rumores y es una política de empresa que tenemos que cumplir", dijo González-Bueno quien insistió en la idea de que la solución es ver los próximos resultados económicos de la entidad. "Llevamos un año excelente, va a ser un gran año", finalizó.

La consejera delegada del banco Uno-e, propiedad del BBVA, Cristina de Parias, coincidió con la idea de sus bancos competidores. "Tenemos un gran grupo detrás que nos respalda" y esto "está demostrado" por los resultados que año a año se registran.

CRECIMIENTO

En cuanto a las perspectivas de crecimiento, estas tres entidades pronostican que en unos cinco años se situarán, si se suman todos sus beneficios, entre los tres primeros puestos del sector de la banca a través de la Red.

En este sentido, coincidieron en subrayar que la banca electrónica tiene "un gran futuro" por delante, si bien asumen que el trabajo "no será fácil".

Pese a que estas instituciones se caracterizan por no tener oficinas, los representantes de los tres bancos virtuales reconocieron que la presencia física de una oficina será "muy importante" en el futuro.