Aznar, que ya se ha pronunciado en anteriores ocasiones contra la independencia de esta provincia y a favor de un Estado mltiétnico ha traido hoy a Kosovo un mensaje de justicia contra los crímenes de guerra, de apoyo a los soldados y de respeto a los acuerdos de paz firmados.

Nada más aterrizar, a las 17:00 hora local, en el aeropuerto de Pristina, Aznar se reunió en esas instalaciones aeroportuarias, durante un cuarto de hora, con el general jefe de la KFOR, el inglés Michael Jackson, y con el administrador de Kosovo.

Los tres hablaron de las necesidades de la fuerza de pacificación y de la situación de los refugidos, algo que los periodistas pudieron ver durante toda la jornada de hoy.

Con posterioridad a esa reunión, el jefe del Ejecutivo se ha transladado en helicóptero hasta la localidad de Istok, donde tienen su base las tropas españolas asentadas en Kosovo. Aznar ha tenido la oportunidad de sobrevolar varias de las zonas afectadas por las tropas serbias antes de abandonar el territorio kosovar.

CONVIVENCIA MULTIETNICA

Al llegar a la base, y tras escuchar el Himno Nacional, Aznar pasó revista a unacompañía de honores y declaró a los enviados especiales que él es "muy partidario" de la convivencia multiécétnica y contrario a quienes quieren Estados étnicamente puros, sean serbios o albanokosovares.

José María Aznar ha traido un mensaje de aliento y apoyo a los 1.174 soldados españoles que están desplazados en Kosovo haciendo una "tarea admirable", ha dicho. Que sepan, insistió el presidente, que la opinión pública española está con ellos.

Aznar no ha querido aventurar cuánto van a tener queestar las tropas españolas en esta provincia yugoslava para pacificarla. No obstante, sí ha reconocido que tiene la impresión de que la tarea va a ser "muy difícil".

"Hay que estar pendientes de muchos frentes, desde el punto de vista de la seguridad ineterior, desde el punto de vista de fronteras, desde el punto de vista político y desde el punto de vista militar", advirtió el jefe del Ejecutivo.

Lo que si es claro, añadió, es que en la Conferencia de Sarajevo sobre los Balcanes, que se va celebar en las próximas horas, tiene que salir un marco de estabilidad porque, en caso contrario, "seguirá habiendo grandes problemas de futuro.

El helicóptero del presidente ha aterrizado en medio de la lluvia en el acuartelamiento de las tropas españolas en Istok. Aznar ha sido recibido por una guardia de honor y luego ha departido con los mandos y los soldados españoles en este destacamento de Kosovo, antes de partir para visitar a los soldados de Medjugorje, rumbo a la ciudad bosnia de Sarajevo, donde iene previsto participar en una cumbre balcánica.

El destacamento que ha visitado Aznar esta tarde en la localidad kosovar de Istok está compuesto por 1.174 soldados, la mitad de los cuales son legionarios pertenecientes al Tercio don Juan de Austria.

Integrados en la brigada italiana, al mando del general Mauro del Vecchio, los soldados españoles han descubierto diversas fosas comunes a lo largo del mes que ya llevan aquí, la más importante de las cuales es la de Rasko, que han podido visitar lo enviados especiales que siguen esta visita.

En esa fosa, según los habitantes de la zona, yacen 100 presos de la cárcel de Istok que, se supone, pudieron ser tiroteados por los serbios en el bombardeo de la OTAN al penal el pasado 25 de mayo.

La población de Istok, que patrullan los soldados españoles a bordo de vehículos blindados es en su mayoría albanesa (un 75%). Los serbios ocupan el segundo lugar, con tan sólo un 15% de población, y el resto son de origen bosniaco (musulmanes bosnios).

Antes de iniciarse la guerra el 21 de marzo, la población de Istok estaba compuesta por 57.000 habitantes, 8.000 de los cuales eran serbios.

Una de las principales funciones que desarrolla el contingente español dentro de la brigada italiana es el control de la seguridad civil y el orden público. Fuentes de dicho contingente explicaron que no sólo empiezan a predominar delitos de venganza sobre serbios y población gitana (la mayoría de esta última está abandonando la zona), sino que comienzan a prolierar delitos comunes como robos, saqueos, etcétera.

Otra de las operaciones que han llevado a cabo los legionarios españoles es escoltar hasta Montenegro a un grupo de gitanos que querían abandonar la región porque consideran en peligro su seguridad.