El líder del PP les entregó la misiva en el transcurso de una comida en su domicilio madrileño, encuentro pendiente desde que el pasado mes de diciembre los tres coincidieran en una reunión del Partido Poplar Europeo en Bruselas y quedaran para celebrar intercambiar impresiones.

Tras más de dos horas de reunión, Aznar acompañó a los dos invitados hasta el portal de su casa, donde posaron los tres para los reporteros gráficos. El presidente del PP no hizo declaraciones. Por su parte, Durán i LLeida y Arzallus reiteraron su oposición a una moción de censura en estos momentos.

El presidente del PNV afirmó que Aznar tiene una convicción "firme" de que las elecciones generales se deben adelantar y de "ué es lo que está sucediendo". "En ese sentido, nosotros no la teníamos (la convicción) tan firme".

"No hemos hecho ninguna conspiración", ironizó Arzallus. "Hemos hablado de conspiraciones posibles pero nosotros no hemos conspirado. Ha sido un rato agradable. No es lo mismo que dialogar por la prensa. Hemos hablado con mucha claridad, sin subterfugios, sin razones aparentes. Pero no hemos llegado a ningún acuerdo".

Ambos reconocieron que se ha hablado de todo, incluido el GAL, y de que los tres stán "preocupados" por la situación del país. Arzallus aseguró que Aznar no les ha ofrecido un gobierno de concentración para salir de la situación.