Zapatero mostró su confianza en que, al término de las investigaciones, el Tribunal de Cuentas "pondrá de reliee que no hay ningún motivo de preocupación, más bien al contrario".

Indicó que, hasta ahora, ninguna de las auditorías realizadas por este órgano a su partido ha revelado posibles anomalías en su financiación, "por lo que el PSOE y el grupo parlamentario tienen la conciencia tranquila".

Preguntado sobre el requerimiento realizado por el presidente del PP, José María Aznar, a Felipe González para que desmienta públicamente las imputaciones hechas contra el PSOE, el ministro dijo que "las explicacines las da únicamente el Tribunal de Cuentas".

Por su parte, el secretario general del Grupo Parlamentario Socialista, Josep Beviá, dijo a la salida de la reunión de la Junta de Portavoces que es un asunto que "afecta al partido y el grupo no tenía ningún conocimiento sobre ello".

Señaló que ni siquiera tenía constancia de ello a través de Carlos Navarro, coordinador de las finanzas del grupo y uno de los diputados socialistas aludidos en las denuncias.

"El grupo cree que sus miembros actúancon absoluta honestidad", recalcó Beviá, quien hoy ejerció tareas de portavoz del PSOE en la Cámara Baja, al encontrarse en Bruselas el presidente del grupo, Eduardo Martín Toval.

CARACTER GROTESCO DEL CASO

El líder del PP, José María Aznar, emplazó en rueda de prensa al secretario general del PSOE a que ofrezca a la opinión pública, de vuelta de Japón, una explicación sobre las irregularidades atribuidas a su partido.

Aznar subrayó que el "caso Naseiro", escándalo en el que se vieron implicado varios dirigentes del PP hace un año por un presunto delito de cohecho en la financiación del partido, tiene tintes "grotescos" en comparación con el posible alcance de las irregularidades del PSOE.

El dirigente conservador instó a Felipe González a que siga el ejemplo de la dirección del PP tras las denuncias del "caso Naseiro", y adopte medidas similares, como aceptar la dimisión de alguno de los presuntos implicados o crear una comisión de investigación interna.

Tras recalcar su tesis de que las cuestiones políticas no deben judicializarse", Aznar negó que el Partido Popular haya adoptado una "actitud de silencio" tras las denuncias contra el PSOE.

"Creemos que el único que tiene la responsabilidad de extraer consecuencias y responder a la opinión pública es Felipe González. Entretanto, los jueces sabrán si deben actuar o no", indicó Aznar.

CONSTANCIA DE LA VERACIDAD

Manuel de la Rocha, portavoz de la corriente crítica del PSOE Izquierda Socialista (IS), abogó por que todas las fuezas políticas del país sean "más respetuosas" con los criterios de legalidad y transparencia que marca la ley en materia de financiación de los partidos.

De la Rocha consideró que en el caso concreto de las recientes denuncias contra el PSOE, el Tribunal de Cuentas es el órgano más idóneo para esclarecer estas imputaciones "en tanto no se tenga constancia de su veracidad".

Requerida su opinión sobre las causas que han llevado a la dirección del PSOE a no salir al paso de estas acusaciones inmediaamente después de ser publicadas, el portavoz de IS sostuvo que "los dirigentes políticos no siempre tienen que estar saliendo al paso de todas las denuncias".