Aznar hizo estas afirmaciones en un mitin de su partido en el citado frontón de la capital donostiarra, ante unas 2.000 personas llegadas desde distintos lugares de Euskadi, La Rioja y Castilla y León.

El presidente del PP, al que precedieron en el uso de la palabra el presidente del partido en el País Vasco, Jaime Mayor Oreja, y el portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de San Sebastián, Gregorio Ordóñez, finalizó su discurso afirmando: "Que ladren lo que quieran, no van a torcer la voluntad de la inmensa mayoría de los españoles, que han puesto en marcha el camino de la alternancia".

José María Aznar concluyó con un "Gurekin Euskalherría aurrerá, gurekin España aurrerá" (Con nosotros Euskaherría adelante, con nostros España adelante) un discurso en el que resumió los tres objetivos que él quiere para el País Vasco: paz, estabilidad institucional y recuperación económica. Respecto a la paz, dijo que quiere una normalización y un País Vasco donde "las leyes se cumplan y se sepa".

En sus continuas alusiones a las palabras de Xabier Arzalluz sobre la deslealtad del PNV a la Constitución, Aznar advirtió que no se puede estar cuestionando el marco político todos los días y que el Estatuto esel instrumento más adecuado para el País Vasco y para su necesaria estabilidad.

En el tramo final de su discurso, el líder popular insistió en responder a lo dicho por González en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, para asegurar que tiene razón el presidente del Gobierno cuando dice que la alternancia no se da, sino que se gana: "Por eso le ganamos el 12 de junio y por eso le volveremos a ganar, y por eso España tiene su alternancia y su alternativa democrática".

Acusó una vez ás al jefe del Ejecutivo de no respetar las reglas de juego y le negó "autoridad moral ni política" para remontar la crisis política y económica. "Quien tiene la sombra y la realidad de la corrupción, que planea como una losa, quien ha manchado el Banco de España, la Guardia Civil, las oposiciones (en relación al 'caso Osakidetza'), no tiene autoridad moral ni la tendrá".

Por su parte, Jaime Mayor Oreja hizo hincapié en que el euskera no debe ser instrumento de politización y afirmó que amar esta tiera no significa que todos los funcionarios tengan la obligación de hablar euskera.

Con motivo del mitin del PP, medio centenar de jóvenes que apoyaban la insumisión se concentraron junto al frontón Anoeta, donde exhibieron una pancarta con el texto: "PSOE encarcela, PP apoya y PNV colabora". La 'Ertzaintza' cargó contra los manifestantes para que se disolvieran.