Aznar hizo este llamamiento en la intervención con la que clausuró la Convención Municipal del PP catalán, que se celebró en la localidad barcelonea de Hospitalet, con la asistencia de militantes y responsables municipales del partido.

El presidente, aquejado de una fuerte gripe, definió la diversidad de la sociedad catalana como "una de sus principales riquezas", y pidió que "eso sea bien recogido en nuestro partido y defendido como uno de nuestros mensajes a la sociedad catalana".

Insistió en la necesidad de conseguir que los catalanes vean al PP como el partido "centrista y moderno capaz de resolver los problemas de España" desde "la genrosidad, la pluralidad, y la lealtad".

En su breve discurso, José María Aznar destacó que los objetivos de su Gobierno para el futuro serán acabar con al violencia en el País Vasco, vencer el problema del paro y lograr la convergencia real con los países más ricos de Europa.

Reiteró su voluntad de alcanzar la paz en Euskadi, su compromiso de crear 1.300.000 empleos en los próximos cuatro años y su defensa del marco constitucional y estatutario actual que, a su entender, permite a todos los ciudadnos sentirse "razonablemente cómodos".

Sobre la próxima celebración del Congreso del PP, Aznar insistió en que no caerá en la tentación de "no hacer nada" porque "ahora las cosas van bien", sino que se comprometió a impulsar la acción del partido durante los próximos años.

Pese al incidente de su visita al campus de la Universidad de Bellaterra, Aznar aseguró en Hospitalet que su estancia en Barcelona ha sido una "jornada estupenda".