AZNAR AFIRMA QUE EL "REFORMISMO TRANQUILO" CARACTERIZA LA LEGISLATURA QUE VA A CONCLUIR

MADRID
SERVIMEDIA

José María Aznar ha hecho hoy balance de los más de tres años de legislatura transcurridos y ha concluído que si se puede definir por algo es porque ha estado presidida por un "espíritu tranquilo, de reformismo tranquilo". Un clima "de sosiego" que espera que continúe en los seis meses que restan para convocar elecciones.

Aznar ha intentado bromear y transmitir tranquildad desde el primer minuto de la rueda de prensa. Al inicio ha bromeado con el portavoz, Josep Piqué, sentado en primera fila, al señalar que le veía "más relajado" porque este viernes no tenía que comparecer ante los medios de comunicación.

El jefe del Ejecutivo ha señalado que él también está "muy relajado". Se ha sorprendido de tener que explicar por qué agota la legislatura, cuando lo lógico sería lo contrario, y ha añadido que pretende "culminar la tarea" en los próximos seis meses porque tiene e apoyo "suficiente" de los socios parlamentarios, CiU, PNV y Coalición Canaria.

Entre los objetivos del Gobierno para los próximos meses están la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado para el 2000, que se están elaborando con una expectativas "mejores que las ya muy buenas de 1999" (en alusión a la modificación del 3,5 al 3,8% del crecimiento económico para este año).

Pero lo que más ha resaltado José María Aznar es el proyecto de Ley de indemnización a las Víctimas del terrorismo.Sólo esta ley, advirtió, "merece por mi parte la inteción de agotar la legislatura". "No podrán resolverse muchos problemas si no hay una reparación moral y material de las víctimas", insistió.

MAS PRESENCIA PUBLICA

Cuando se le ha preguntado por un posible cambio de Gobierno, ha señalado que antes de las Elecciones Generales del 2000 no lo tiene previsto, "después sería bastante lógico que las cosas cambiaran", comentó.

Por otro lado, el presidente del Gobierno ha anunciado que comparecencias nte la prensa como la de hoy va a ser mucho más frecuente a partir de ahora.

En en todo momento ha intentado desligar sus actuaciones, tanto en materia de pensiones como de otras políticas, del escenario electoral catalán, para el que los sondeos pronostican un retroceso del PP (11-13 diputados), que quedaría muy lejos de los principales aspirantes, CiU (55-56) y PSC, (49-51).

Hasta tres veces ha repetido Aznar que "El Gobierno no participa en las Elecciones catalanas", para hacer frente a la tess del PSOE de Joaquín Almunia, que las considera unas elecciones primarias de las generales.

Preguntado por la afirmación del candidato del PSC, Pasqual Maragall, de que una nueva victoria de Pujol dejaría en muy mal lugar a Cataluña, Aznar ha afirmado que en términos democráticos le parece "chocante". Aunque ha reconocido que los 19 años que lleva Pujol gobernando son muchos y conviene que las políticas "tengan su contrapeso".

(SERVIMEDIA)
10 Sep 1999
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