En declaraciones a Servimedia, Zuazu señaló que "las compañías aéreas mundiales deberían de tener listas con los pasajeros agresivos, para que no vuelvan a volar en la compañía donde han cometido algún acto".

La delegada sindical aseguró que uno de los motivos por los qu se produce esta agresividad es por el consumo de alcohol, "que en vuelo afecta más que en tierra".

En este sentido, Zuazu pidió que las compañías aéreas endurezcan las normas sobre el consumo de alcohol y autoricen a los tripulantes de cabina (azafatas) a prohibir el consumo de este tipo de bebidas a pasajeros que consideren que han alcanzado un alto grado de embriaguez.

También destacó que "a lo mejor es casualidad", pero el incremento de pasajeros agresivos ha ido en auge desde que las compañís aéreas han prohibido fumar durante el trayecto.

De hecho, Zuazu aseguró que más de un compañero ha sufrido agresiones verbales por parte de algún pasajero, "incluso a un compañero le rompieron un labio de un puñetazo".

SINDROME CLASE TURISTA

Por otra parte, Macarena Zuazu destacó que uno de los principales problemas que tienen los pasajeros durante el vuelo es el llamado "síndrome de la clase turista".

En este sentido, la delegada sindical explicó que en los vuelos largos, de más de treso cuatro horas, "es aconsejable que el pasajero se de una vuelta por el avión para estirar las piernas".

El problema de este síndrome, según Zuazu, se da cuando el pasajero se encuentra durante todo el trayecto en su sitio, "puesto que el espacio entre butaca y butaca cada día es menor, y eso provoca que la sangre no circule bien por las piernas cuando se está mucho tiempo sentado".