Consideró que la universidad es “fundamental para la comprensión del hombre y de su existencia y lo es también para el progreso”. También dijo que es necesario “preservar este faro de libertad y de búsqueda de la verdad, lejos de quiénes quieren pretender convertir la universidad en una plataforma de agitación política dónde se persigue a quiénes con respeto defienden sus ideas”.

Además, comentó que “desgraciadamente vemos a menudo imágenes de campus que no son un lugar abierto y tolerante en el que debatir en convivencia y, por eso, nos preocupa las leyes con las que se pretende devaluar la excelencia y colonizar la universidad”.

Así, denunció a los que “consagran los paros estudiantiles sin garantizar el derecho de quiénes sí quieren asistir a clase y ponen cuotas en todos los ámbitos". A su juicio, de este modo, "traicionan el espíritu universitario”.