Beramendi declaró a la Cope que los miembros de HB "son capaces de colgar en las fiestas del pueblo el anagrama de ETA". "Es curioso cómo Herri Batasuna es capaz de agarrarse a la ley vigente par criticar una ilegalidad por parte del Gobierno central y, sin embargo, se olvida de que la ley establece cosas sobre la extorsión, el engaño, la falsedad, la amenaza y el terrorismo".

El concejal de EA manifestó también que los ciudadanos están animando a los ediles de su partido y del PNV, pero admitió que "la gente no se atreve a hablar en alto. Parece que hay una ley no escrita, pero que se siente en el estómago. Así funcionamos y tiramos para adelante".

El pleno del Ayuntamiento de Oyarzun etá formado por siete concejales de Herri Batasuna, cuatro de Eusko Alkartasuna y dos del PNV. Los concejales de EA y del PNV no acuden, como norma, a las sesiones en las que se debaten asuntos extramunicipales de carácter político.

Según explicó Beramendi, la razón de no acudir a estos plenos es que los concejales de HB aprovechan estas sesiones "para crear contradicciones, para dividirnos. Nosotros procuramos no entrar y dejar que hagan ellos solos su cuento".