Este aumento del gasto en un 12% supone una "abultada factura" para Santín, que se produce porque el alumbrado que tiene el consistorio es "caro, antiecológico e ineficiente", según un comunicado del grupo socialista.

La causa se produce porque 218.000 farolas utilizan el mercurio como fuente de alimentación y ésta es una "sustancia altamente contaminante, muy cara, de baja eficacia y de difícil eliminación y reciclado".

Santín exige al alcalde de Madrid, Alberto Ruíz Gallardón, que sustituya el mercurio por sodio y que cumpla las medidas de ahorro energético que prometió, porque, sólo se ha renovado el 9% de las farolas en los últimos cinco años.

Para el edil socialista la suma de luz de estas farolas y globos son la causa de la permanencia de un "hongo lumínico de más de 600km2 que impide ver el cielo y las estrellas en Madrid", y a la vez, molesta a miles de domicilios.