La medida, que pretende compatibilizar el derecho a desarrollar una actividad legal con el derecho al descanso y la seguridad, tuvo el voto negativo del grupo de concejales del Partido Popular, que consideraron que era inútil para resolver los problemas que provoca la denominada "movida juvenil".

La suspensión de licencias no afectará a las solicitudes ya cursadas y con los expedientes áun en trámite, por carecer el acuerdo de carácter retroactivo.

El ámbito de la "zon saturada" para actividades destinadas a la venta de bebidas, tales como "pubs", bares y discotecas, según dice textualmente el acuerdo, está comprendido entre la calle Gerona y la plaza San Pedro, por un lado, y la calle Conde Ofalia y la plaza de la Catedral, por otro, donde en un radio de 300 metros existen 55 establecimientos de ese tipo.

La concejala de Medio Ambiente, Antonia Amate, señaló que la medida adoptada sigue y complementa los controles sobre licencia de apertura y aparatos de música y os precintos que vienen realizando los técnicos municipales.

Asimismo, señaló que esta iniciativa obedece, incluso, a un requerimiento que el Defensor del Pueblo hizo al Ayuntamiento a raiz de las quejas remitidas por los vecinos de la zona afectada.