Según ha confirmado Servimedia en medios de la abogacía, el principal acusado, U.R.D., es un abogado de 24 años de edad que acaba de salir de la facultad y que estaba trabajando como ayudante del fisal en el juzgado número uno.

El periódico La Provincia publica en su edición de hoy que, en total, son cuatro las personas que están implicadas en el hurto de estos millones. Además relaciona el robo de este dinero con la desaparición de los sellos oficiales del juzgado, que fueron sustraídos hace nueve meses por las mismas personas que en la actualidad estarían implicadas en la apropiación del dinero del juzgado.

Los 25 millones, que estaban depositados en una cuenta del BBV, fueron sustraídos através de un mandamiento que tenía, además de los sellos oficiales, las firmas del juez y del secretario, que fueron falsificadas.