En un comunicado, la AVT manifestó, al igual que en anteriores ocasiones, que no puede llevarse a cabo un juicio en "el que de antemano se sabe que no se conocerá la verdad de lo ocurrido y donde no se encuentran las claves para saber quiénes fueron los responsables reales de la matanza".

El colectivo que preside Francisco José Alcaraz, en el que hay víctimas de la masacre, dice que la apertura del juicio resulta "tan absurda como que un equipo de cirujanos empiece a operar a un paciente sin haberle hecho todas las pruebas necesarias con anterioridad".

Además, considera la AVT que "la apertura del juicio y la posible suspensión de este puede someter a la ciudadanía, y muy especialmente a las víctimas, a la tensión permanente de tener que soportar diferentes actos judiciales, que se vayan sucediendo de forma parcial, sin dar una respuesta definitiva".

Por último, señala que las víctimas representadas por la AVT seguirán exigiendo que se conozca "toda la verdad sobre los atentados del 11-M, sus inductores, autores, colaboradores, motivaciones, etc., para que se haga verdadera justicia, se respete la memoria de las víctimas y se preserve su dignidad".