En un comunicado, ATA reclama al Gobierno medidas de control en los precios que aplican las petroleras españolas ante el "escaso rigor" con el que éstas actúan, aprovechando el alza del crudo para subir precios y, cuando el petróleo baja, fijando rebajas menores.

Según ATA, esos comportamientos "están afectando muy gravemente a ciudadanos, consumidores y a más de 80.000 autónomos que utilizan el carburante para el desarrollo de su actividad". En la última semana, el petróleo ha bajado al entorno de los 25 dólares por barril, un 24%, según ATA, mientras que el gasóleo lo ha hecho en 5,2 céntimos y la gasolina en 3,9, cerca del 7%.

Asimismo, el diferencial de precios entre España y la Eurozona se ha elevado en tres céntimos en el caso del gasóleo y en 1,4 para las gasolinas.

"Esto pone de manifiesto el fracaso de las medidas liberalizadoras en el sector de carburantes en el año 2000, que no han servido ni para bajar precios ni para umentar competencia", según el coordinador general de ATA, Lorenzo Amor.

Por el contrario, "los autónomos y los consumidores en general estamos sufriendo un incremento de precios desmesurado y un aumento de costes de nuestras empresas, frente a un aumento de beneficios de estos monstruos de la distribución energética".