En declaraciones a Servimedia, Tusell argumentó que no hay justificación de carácter histórico para considerar a Canarias o Aragón como nacionalidades semejantes a las tres consideradas habitualmente cmo "históricas": País Vasco, Cataluña y Galicia.

A su juicio, son intereses políticos partidistas los que han llevado a las autoridades de Canarias y Aragón a promover sus regiones al estatus de nacionalidades, aprovechando "una situación parlamentaria" en la que el Gobierno necesita los votos de las formaciones nacionalistas y regionalistas.

Tusell instó a la clase política española a que "se repiense a si misma" y "a que trate de no complicarle los problemas al ciudadano mediante esta espiral d reivindicaciones que, en vez de mejorar la gestión, contribuyen a crear una creciente sensación de desconcierto".

Sobre las dos recientes solicitudes de nacionalidad para Canarias y Aragón, Tusell aseveró que ninguna de las dos "tiene que ver ni con la historia ni con el pasado, sino con intereses partidistas".

Al mismo tiempo, expresó su temor a que otras comunidades autónomas acuerden reclamar lo mismo, con la finalidad de obtener mayores competencias para reclamar mejoras fiscales u otras reiindicaciones.