Múgica aseguró a Servimedia que Batasuna, aunque presume de tener una militancia muy activa, va a comprobar que sus partidarios realmente solo "son capaces de gritar mucho, pero luego ni chicha ni limoná y se vendrán montaña abajo".

A su juicio, la resolución del juez tiene rigor legal y responde a una necesidad social, al igual que el proceso abierto hoy en el Congreso de los Diputados para promover la ilegalización de Batasuna.

E portavoz del Foro de Ermua recriminó al PNV que, mientras se tramitaba la Ley de Partidos reclamó que se aplicara el Código Penal, y ahora que el magistrado Baltasar Garzón lo aplica, los dirigentes peneuvistas siguen quejándose.

Subrayó que la aplicación de las medidas decretadas por el juez de cerrar las sedes y suspender las actividades de Batasuna no deberían ser un problema para la Ertzaintza porque cuenta con 7.000 agentes y "sonaría a broma" que no fuera capaz de aplicar la disposición judicia.