Batzarre afirma, en una nota de prensa difundida hoy, que "no es democrático" aplicar una medida tan drástica como la que decretó Garzón porque se realiza a partir de unas "imputaciones dirigidas a un colectivo, pero sin la personalización necesaria y sin haber sido demostradas".

A juicio de Batzarre, "este tipo de actuaciones, así como la violencia y persecución ejercita por ETA hacia concejales del PP y del PSOE y otras personas que defienden proectos nacionales distintos nos alejan de la paz porque ésta nunca surge de la derrota de un adversario, y alimentan la crispación, el enfrentamiento y el sufrimiento para ambas partes".

"Hace falta un cambio de rumbo profundo en ambas partes en base a una reconsideración exquisitamente democrática", subraya el comunicado, porque el Gobierno central "debe dejar muy clara la viabilidad de todos los proyectos políticos, incluido el independentista, si ésa es la voluntad expresada democráticamente por el ueblo vasco".

Para Batzarre, "ETA debe reconocer la pluralidad de identidades de Euskal Herría y su legitimidad con todas las consecuencias, ya que hoy atenta gravemente contra esa pluralidad, y renunciar a imponer mediante la violencia sus tesis".