Francisco Beltrán recalcó que no se siente responsable de lo sucedido y que dimite "abrumado por el peso de la soledad y la falta de apoyo por parte del Gobierno Civil de Huesca".

"El Gobierno Civil de Huesca" aseguró el alcalde, "es el responsable de todo lo que ha pasado porque yo estuve varias veces allí y les decía que la situación era muy grave, que buscaran soluciones, ylas soluciones que han buscado consistían en hacer redadas, a los dos días los soltaban y...".

El alcalde dimisionario anunció esta mañana que no tiene sentido seguir al frente del Ayuntamiento si una buena parte del pueblo está contra él.

también explicó que los últimos acontecimientos vividos en Fraga acabaron con su capacidad de resistencia: "Esto parecía la Guerra Civil, cuando la República (...) Llevo varias noches que no duermo; he tenido que marcharme fuera de casa, y la familia está asustda por las llamdas telefónicas de amenazas".

Francisco Beltrán, alcalde socialista que dice conocer bien la localidad fragatina tras diez años en la alcaldía, no se atrevio a vaticinar lo que va a pasar a corto o medio plazo, e insistió en que lo ocurrido transciende a un mero conflicto racista para convertirse en una cuestión de Estado.

"Puede pasar cualquier cosa, el Gobierno no quiere tener malas relaciones con los países magrebíes y esto impide que se pueda llevar una política sana. Yo soy patidario de los derechos humanos, pero también era partidario de aplicar la Ley de Extranjería, dada la acumulación de ciudadanos magrebíes en nuestra localidad", coinsideró.

Después de un fin de semana bastante tenso, la tranquilidad pareció regresar de forma momentánea a la localidad.

INTERVIENEN LOS "JUSTICIEROS"

La razón de la sinrazón llevó a una treintena de jóvenes de Fraga en la madrugada del sábado a decir en la plaza del Ayuntamiento que había llegado la hora de dar un escarmiento a lo magrebíes que en esta temporada de recogida de fruta llegan a la ciudad en masa, con papeles en regla o sin ellos, huyendo de la miseria de sus países de origen, Argelia y Marruecos principalmente, y con la intención de ganarse un jornal como temoporeros.

El grupo de "justicieros", armados con palos y navajas y ocultando sus rostros con cascos de moto, agredieron a varios magrebíes que dormían en un pinar junto a las piscinas municipales.

El grupo de agresores dejó tras de sí seis heridos, uno d ellos de gravedad, y minutos después, fuerzas de la Guardia Civil detuvieron a seis de los delincuentes, que fueron aplaudidos y vitoreados por un grupo de fragatinos cuando salían de prestar declaración ante el juez, que dictó el auto de prisión incondiconal, sin fianza, para todos ellos.

La primera autoridad provincial se pronunció de inmediato sobre lo ocurrido, con la afirmación de que "ante tan lamentables hechos, que son una concreta manifestación de xenofobia, el Gobierno Civil de Huesca denunia y condena sin paliativos tales conductas", según explicó el propio gobernador civil, Vicente Valero.

Ayer, domingo, Fraga vivió una situación de tensa calma. El campo de fútbol, donde se alojan la mayor parte de los temporeros, estaba fuertemente custodiado por la Guardia Civil.

Mientras tanto, los inmigrantes, acusados de ser los autores de numerosos robos y agresiones que ocurren en la localidad, denuncian que la situación se veía venir, aunque también afirman que esto no va a quedar así y elos son los primeros que anuncian venganza.

"No sé lo que quieren de nosotros. Si quieren que nos vayamos de Fraga, nos iremos, pero pedimos humanidad, porque la violencia no sirve para nada, y si quieren violencia, habrá más (...). Acuérdate de que los argelinos no somos los cabrones, lo que hicieron ayer los racistas es la falta más grande de su vida. Y no vamos a cerrar nuestra boca, vamos a repostar. Los amigos de Javi, Carlos, Oscar.. van a pagar un día u otro", según declaró uno de los temporero norteafricanos que dijo hablar en representación de todos sus compañeros.